En estos días de calor muchos estamos de vacaciones y tenemos tiempo para hacer cosas que habitualmente no hacemos. Ahora es un buen momento para practicar el Geocaching, una actividad que deberemos hacer al aire libre y muy indicada para hacerla en familia.
El Geocaching es una actividad a nivel mundial que consiste en esconder «tesoros», marcar su posición con GPS y registrarlos en su web para que los demás podamos encontrarlos.
Estos principios tan básicos engloban toda una filosofía, con la excusa de encontrar estos puntos, visitaremos muchos parajes curiosos, característicos o excepcionales de cada lugar.
Hay diferentes tipos de cachés (así se llaman los elementos a encontrar) aunque el más extendido es el de un recipiente físico que contiene, como mínimo, un papel donde apuntar nuestro nombre para demostrar que lo hemos encontrado. Los hay de diferentes tamaños. Los más pequeños pueden ser un recipiente de un antiguo carrete fotográfico y los hay de más grandes, tipo recipiente hermético. Estos tipos de caché tienen más gracia ya que en ellos, además del papel para apuntar nuestros nombres y alguna frase extra, encontraremos «regalos». La idea es dejar nosotros algo allí y si queremos coger algo lo que nosotros dejemos debe ser de un valor igual o superior. Una vez encuentras el primer punto el Geocaching engancha y estarás deseando ir a buscar nuevos puntos.
Para encontrar estos puntos necesitamos 2 cosas, acceder a la web de Geocaching.com y un GPS.Para hacerlo todo más fácil y más cómodo tenemos la aplicación para el iPhone.
Geocaching para iPhone nos muestra los cachés más cercanos a nuestra situación, sus coordenadas, la dificultad del escondite y del terreno donde se encuentra, cuantas veces se ha encontrado el caché, cuando fue creado y lo más importante, el registro de la gente que ha ido encontrando o no el caché. Esto nos ayuda a conocer la dificultad real y si el «tesoro» aún sigue allí y no ha desaparecido.
Una vez hemos seleccionado un punto la aplicación nos mostrará un mapa (podemos elegir varios tipos de mapa, tanto satélite como topográfico). Veremos donde estamos y donde está el caché y al girar el iPhone nos mostrará la dirección a seguir y la distancia en linea recta hacia él.
En mis últimas vacaciones estuve buscando diferentes cachés, en sitios que no se me hubiera ocurrido ir, lo que me permitió adentrarme en unos bosques preciosos y encontrar unas fuentes y caminos que no aparecían en las guías.
Aunque existe una versión gratuita de la aplicación gratuita yo os recomiendo la versión de pago, que nos permite descargar puntos y mapas para usarlos offline y disfrutar en mitad de la montaña de esta bonita actividad.
Geocaching tiene un precio de
Geocaching: AppStore.